Sin echar mano a grandes presupuestos, los cinco candidatos no partidarios están realizando una campaña modesta y con poca presencia en comparación con el resto de institutos políticos.Esto se deriva de la escasez de recursos con los que cuentan para hacer campaña, debido a que no hay grandes empresas o grupos que los financian y han incurrido en préstamos personales o de familiares y donaciones de amistades o conocidos.
Todos apuntan que estarse financiando las actividades de esta manera los aleja de poder comprometerse con un sector que busque obtener réditos de llegar a la Asamblea Legislativa y otros de ellos aseguran que es difícil que estos sectores los financien, puesto que sus propuestas beneficiarían a los de escasos recursos.
También están conscientes de que les es imposible competir en el mismo nivel con los candidatos de los partidos políticos.
Romeo Rubio, candidato por la circunscripción de La Unión, considera que tienen una gran desventaja, sobre todo porque ellos no tienen derecho a deuda política, a diferencia de los partidos que cuentan, además, con grandes presupuestos.
Esto no ha mermado el impulso por llevar sus plataformas legislativas a la población, pero sobre todo explicarles la novedad de las candidaturas no partidarias.
"Me abren las puertas y me dicen ¿y qué es ese partido? Ellos no entienden, creen que somos partido político. Yo les digo que esto es algo nuevo que se está dando en el país", explicó Roy García, candidato por Chalatenango y quien es conocido por participar en movimientos pro salvadoreños en el exterior.
Desde el uso de volantes en blanco y negro y en papel brillante, "banners", afiches, camisas, calendarios, algunas vallas y perifoneo, entre otros, los candidatos independientes están tratando de cubrir todos los municipios de los cuatro departamentos en donde están compitiendo.
William Huezo, uno de los aspirantes por San Salvador, expresó que tiene previsto entregar 50 mil volantes que contienen su plataforma legislativa y que esto le permitirá llegar a más hogares que a través de la radio y televisión.
Asegura tener presupuestado 10 mil dólares para su campaña, de los cuales ocho mil son de donaciones. Esto debido a que su candidatura fue lanzada por el Movimiento por la Democracia Participativa.
"A mí me da pena cuando llego a los mercados o pasamos por las calles y nos dicen ¡Hey! Dennos dinero. Necesitamos vasos, otras cosas, no papeles (y eso se debe) a campañas electorales sin contenido político. No podemos competir ni queremos competir de esa manera por el pueblo", dijo.
Gilberto Morán, el otro candidato por San Salvador, asegura que ha tratado de cubrir con los pocos fondos los 17 municipios. Agrega que en los municipios más alejados de la capital es menor la información con la que cuentan sobre las candidaturas no independientes y en específico de su plataforma electoral.
El actual diputado independiente y candidato por Ahuachapán, Eduardo Gomar, asegura que su campaña se ha basado en colocar banners, realizar pequeños mitines y visitas casa por casa.
Calcula una inversión de 20 mil dólares, de los cuales ha gastado 12,300. "Los activistas que apoyan mi campaña han colocado pancartas en siete municipios. Esperamos que para el final de la campaña se hayan cubierto los 12 municipios", aseguró Gomar.
También los candidatos se han auxiliado de las redes sociales. Por ejemplo, los cinco candidatos tienen perfiles en Facebook, pero solo Gomar y Rubio lo usan con más frecuencia. Y Rubio echó mano de You tube, donde han subido un video de un corrido pidiendo el voto.
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